Terapia de pareja
La terapia de pareja es una alternativa para solucionar ciertos problemas que surgen a lo largo de una relación. A veces el trato entre ambos se deteriora, las discusiones aumentan en frecuencia y/o intensidad, surgen enfriamientos a nivel afectivo, etc. y cuando todo esto o alguna de estas cosas ocurren pero sigue existiendo amor y un deseo de continuar con la relación, es la terapia de pareja una opción para poder combatir estos problemas.
Al inicio de la terapia, se recoge información de ambas partes sobre todos los aspectos de la relación (comunicación, afectividad, sexualidad, ocio, relaciones familiares, filosofía de vida, relación con familiares próximos, economía y tareas de casa, educación de hijos, etc.) para poder valorar con objetividad los aspectos más relevantes y ayudar a modificar aquellas cosas que hagan que la relación se deteriore o no evolucione con normalidad.
Siempre es necesario partir de la base de que en la terapia de pareja, el trabajo fuera de consulta es cosa de dos. Es decir, los dos miembros que conformen la pareja deberán participar activamente en todas las tareas que se indiquen en consulta para que haya una responsabilidad e implicación al cincuenta por ciento.
En las sesiones hay momentos tanto individuales como de pareja, así que, en ocasiones entra en consulta uno de los dos miembros y en otras entran los dos.
Si uno de los dos miembros se niega a ir a terapia, no se le puede obligar. El otro miembro pondrá en práctica todo lo que vaya aprendiendo y trabajará de manera individual.
Por lo tanto podríamos resumir diciendo que este tipo de terapia conlleva una recogida de información, un análisis de los problemas existentes y una aportación de herramientas/soluciones para que la pareja practique y lleve a cabo fuera de consulta.