Vidas felices en las redes sociales

redes sociales

Desde que comencé a trabajar en el año 2005 hasta el día de hoy, han surgido muchas patologías nuevas como por ejemplo la adicción a las nuevas tecnologías, la vigorexia (hacer ejercicio físico en exceso), la nomofobia (miedo irracional a salir de casa sin el teléfono móvil), etc. y también muchas problemáticas nuevas tanto a nivel individual como de pareja.

En 2007 nace la archi conocida red social Facebook.  Esta red produce en las parejas un fenómeno muy curioso que años atrás no existía de manera tan intensa y tan frecuente: la frustración. Os explico por qué.

En estos años que ya han pasado desde que se creó, los pacientes me han contado que dedican muchos minutos de su día a ver fotos de los demás, a “explorar” las vidas de los otros ….  y todo a través de las redes sociales. Normalmente, los usuarios cuelgan las fotos de sus mejores momentos (cenas en buenas compañías, salidas con amigos, viajes, momentos románticos, etc.) y todas ellas acompañadas de cálidos comentarios y abundantes “me gusta”.

Es entonces cuando surge la frustración y la creencia de que las vidas de los demás, las familias de los demás, los amigos de los demás, las parejas de los demás y los trabajos de los demás, los cuerpos de los demás, las caras de los demás, son mejores que todo lo nuestro. La persona en sí se decepciona por aquello que tiene, añora todo aquello que tuvo y que no tiene actualmente, y desea lo que vive el otro. Esto, hoy en día, genera muchas crisis de pareja y muchas crisis personales.

realidad

Nadie cuelga fotos de la discusión de anoche, sino, la foto romántica con él/ella. Nadie cuelga la foto de las ojeras por no haber dormido bien. Nadie pone la foto en la que aparece un domingo limpiado la casa con 40 grados en el exterior. Tampoco aparece en el muro el comentario de lo aburrido que ha sido el día, sino, por ejemplo lo bien que se lo han pasado porque su pareja le llevó de sorpresa a un concierto.

Tener en cuenta que no es una realidad completa todo lo que se lee y que la vida normal de cualquier persona está llena de momentos intensos, momentos positivos, momentos neutros y momentos negativos ayudará a poner los pies en la tierra y no elaborar creencias internas erróneas para nosotros mismos. Todo el mundo tiene de todo, pero lo que se expone, suele ser lo bonito.

Por ello, después de muchas sesiones de terapia de pareja, extraigo que las redes sociales son el origen de tantos problemas de pareja hoy en día. Hay que recordar que la red social transmite sólo la historia que el usuario quiere contar, por lo tanto, es información incompleta, porque no aparecen todos los minutos del día de esa persona. No odio Facebook, ni Twitter, ni Instagram, ni mucho menos. Tampoco digo que sean los causantes directos y únicos de una discusión o un problema de pareja. Lo que quiero hacer llegar es que, es súmamente importante que tengamos claro que, lo que vemos, es sólo la mejor parte de la historia de esa persona, no su totalidad. Pasar el tiempo alimentando una envidia y un malestar fundado en información incompleta, es un tremendo error.

comunicacion movil

Llevo 13 años pasando consulta como psicóloga en Murcia y he tenido la oportunidad de ver cómo la sociedad cambia tanto para bien como para mal. Así también ha sido apreciado por otros compañeros psicólogos cuando he hablado con ellos sobre este tema en concreto. Conforme aparecen nuevas tecnologías, corrientes de pensamientos, ideas, modas, etc. las patologías han ido evolucionando, es decir, han aparecido nuevas enfermedades y nuevas adicciones a las que hemos tenido que ponerles nombre.

¿Qué podemos hacer para evitarlo? Todo dependerá del tipo de persona que seamos. Algunas personas les basta con “saber y aceptar” que lo que están viendo es una versión idealizada de la realidad y no es comparable con su propia vida. Estas personas no necesitan más para no sentir esa frustración. Sin embargo, otro tipo de personas, a pesar de ser conscientes de la conclusión “ficticia” que extraen de lo que ven, les lleva a compararse y así encontrar las carencias que tienen con su pareja. En estos casos,es recomendable pasar una temporada sin entrar en redes sociales y desinstalar las aplicaciones del móvil para reconectar con la propia realidad. También saber valorar las cosas que se viven en cada momento, los ratos que se comparten y los minutos que se disfrutan, te acercarán a saborear más la vida.

Y es que…

“Lo que vemos cambia lo que sabemos. Lo que sabemos, cambia lo que vemos.” J. Piaget

 Artículo escrito por: Raquel Sastre, Psicóloga.